Parece que premiaron con 150 mil dólares para preservar a los pinguinos a un tal Pablo García Borboroglu. El tipo dice que con la papela realizará un proyecto de conservación durante tres años.
Todos sabemos que los pinguinos son objeto de culto y de guita, por parte de los medios de comunicación y la runfla progresista. Se discute de Alfonsín, se discute de Perón, de Housseman, pero nunca se hablará mal de un pinguino. Aunque sean todos putos.
Sí. Un estudio de la Universidad Roberto Mouras descubrió que la verdadera razón por la cual esta especie corre peligro de extinción es el alto el índice de homosexualidad tanto en machos como hembras.
Según el Doctor Roberto Rivelino "esos animales conforman verdaderas comunidades homosexuales y la nueva joda que agarraron es autogarcharse. Así que mientras sigan así se les va a complicar la cosa" dijo Rivelino, que en sus horas extras venden anillos presentados sobre un paraguas negro en plaza Miserere.
¿Quién se empernaría un pinguino?
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