“Las drogas me dieron nuevamente ganas de hacer cosas, ése es el problema con ellas", dijo el ex número 1 del mundo del tenis, André Agassi, ante una multitud que lo escuchaba, con la baba en la boca en el galpón de la Cooperativa Rayito de Luz, donde se dictan los talleres populares enmarcados en el Plan Nacional Argentina Baraja del Ministerio de Finanzas Sociales.
"Me daban un montón de energía, era Speedy González”, continuó el astro mundial de la rasqueta, mientras el nutrido grupo, casi todos pacochavistas, pacochorros afronegroides con venéreas, mercavietnamitas y otras especies que habitan el conurbano bonaerense ya empezaban a preparar el arsenal oculto en el hígado del ex dirigente piquetero Luis Delía.
“Sin embargo, ahora me dedico a estudiar en la Universidad de Kimberley el impacto de los sueters de Orlando Barone en la población que va de los 25 a 40 años de la Capital Federal y el conurbano bonaerense desocupados y sin estudios en la actualidad”, puntualizó el as raquetero.
“Me está yendo muy bien con eso y además estoy asesorando a Víctor Hugo Evo Morrales en debates político-comunicacionales desde el exterior. Cosa que no es tan sencilla como se creen todos los filo kirchneristas disconformes porque no agarraron nada como la gente”, remató Agáis. Acto seguido admitió que también y paradójicamente se junta por las tardes de sol a jugar a la baraja y tomar té en pelotas con Cecilia Pando, Pancho de la Gente y Lilita Downes de Carrió. “Son muy divertidos en la intimidad”, aseguró Agarchi al momento de aspirarse un tubo de pelotitas de tenis que después bajó con dos botellas de Old Smulger rebajado con Tinner.
1 comentario:
a usté, la música de Alejandro Lerner le quemó la cabeza
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