6 7 8 listos yyyyyaaaaaaaaaaaaaa

El sueño del seguidismo hecho realidad. La patología sin regreso. El kirchnerismo bobo hecho carne y uña esculpida. La gran verdulería de la esquina que necesita el cartabiertismo para poder respirar y reproducir sus días sin sobresaltos dietológicos o alimentarios.
Un enjambre de amor al gobierno rociado de frases como "mmmmmmmmmmm, los medios mienten, mienten, mienten. Clarín es un oligopolio que transó con la dictadura militar, sí es así y golpea la mesa. Hay los medios tiran mala onda todo el día y son golpistas. Quieren derrocar a un gobierno que está tratando de redistribuir la pobreza, eeee digo la riqueza", jadea con la entrepierna recién enjuagada la mujer de los 365 peinados caras nuevas al año Carla.
El ser progresista por excelencia se revuelve y se desata locamente desde las entrañas más profundas y ardientes, y se escucha: "yo creo en lo que pienso y lo que pienso creo que es lo que hace el gobierrrrno o mas o menos así. Y encima estoy de moda en todos los bares de Palermo. Y mis columnas se usan en todos los bachilleratos populares de fábricas recuperadas, donde en la puta vida voy a pisar, pero que cada vez me gustan más. Yo soy lo que debe ser y hacer todo aquel que lee sobre la pobreza y se desgarra mientras imagina un 92 en camino de cintura que revienta de pobrerío, pero que cuando siente ganas de hacer algo, rápidamente pide la cuenta y se las pica a comprar una cartera nueva". Sí, soy Sandra.
Y el perioficialismo tiene lugar también para el reviente. Un pibe que no puede mas con sus cuerpo. Que desborda por los costados y se le explotan los ojos en cada respingo y parpadeo. Por momentos el ácido y por momentos el gordo bueno. Mezcla de Jorge Porcel e Inda Ledesma. El magnífico Cabito.
"Yo también voy a Recoleta y hablo de los pobres. También me puedo pegar una vuelta por el country y hablar del ingreso universal a la niñez". Sabe usar estos lentes que ahora usan todas las minas pero más zarpados, jeans bien femeninos y alpargatas. Con su voz engolada de FM 100 cautiva a las viejitas de la cuadra que todas lo quieren como el novio de la nieta, pero mepa mepa que va a ser imposible. Y encima ahora conductor. Si hay que buscar alguien políticamente correcto pare de sufrir, con ustedes: Luciano.
A Barragán lo vamos de dejar pasar. Eso sí, que grabe un CD con su canción oficialista para que todo el mundo sepa lo que hizo y no quede sólo en un círculo de pelotudos que mira ese programete.
Y por útlimo la gran estrella, entre las nuevas estrellas del periodismo. Maestro de periodistas como le dicen muchos de los chupamedias invitados. Tipo que no se puede creer realmente. Todos preferimos de maestro de periodismo a Néstor Fabbri en Sú0per Depor Tea. Tipo que descubre los crímenes de la dictadura después de haber sido responsable de publicaciones con los milicos. Con sus rulos de peluquería dicen, ojo dicen que dicen, que el tipo por un salarito de cuatro dígitos defiende hasta al Pato Abbondanzieri.