Tras cumplir su segundo período como gobernadora de la provincia de Buenos Aires en diciembre de 2007, Rosa Graciela Castagnola de Fernández Meijide se inscribió en la carrera de Contadora Pública Nacional en la Universidad de Belgrado del amigo Avelino Porto. Le dio a los apuntes, se quemó las pestañas, desgastó los numeritos de la calculadora, en sólo un año y medio aprendió a contar y le dieron el título habilitante.
"Son 7.954, los conté de a uno, en Ezeiza, cuando se iban para Europa", dijo la ex senadora aliancista. Fue como su tesis de grado.
Y ahora está dispuesta a ir por más.
Está revisando el número de víctimas de la Shoah. "Mirá, por los que anoté hasta ahora en mi cuaderno Gloria cuadriculado no pasan los 500 mil y sólo el 50% serían judíos", anticipa, mientras espía desde la esquina de Scalabrini Ortiz y Paraguay si Chacho entra al Varela Varelita para ir a escupirle el café.
"Quiero llamar al presidente Fernando Lugo para contarle los muertos de la Guerra de la Triple Alianza, pero ya le aclaré que del millón y pico que siempre se habló me van a quedar unos 300 mil, pero son posta posta, porque a los porotos hay que contarlos de a uno", dice mientras juega con su cuentaganado.
Gracias por la vuelta.
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